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21

Museo Soumaya, Plaza Carso Un discurso estético que cambia vidas

Mexico
Letra Urbana hizo un recorrido por la nueva sede del Museo Soumaya, en México. Su impresionante arquitectura vanguardista aloja la colección privada de la familia Slim y un discurso estético que busca trascender la tradicional función de exhibir arte. El Director General Alfonso Miranda Márquez, asume la apuesta de impactar en la comunidad y afianzar los intercambios culturales con América Latina.

Letra Urbana. La Piedad, Miguel Ángel

Como un moderno Taj Majal, la nueva sede del Museo Soumaya, en Ciudad de México, tiene su origen en una historia de amor. Auspiciado por el reconocido empresario mexicano Carlos Slim el museo honra la memoria de su esposa Soumaya Domit, fallecida en 1999. El imponente edificio, una obra de arte en sí mismo, acoge más de 60,000 piezas de arte entre las que se destaca la más importante colección de esculturas de Auguste Rodín fuera de París y las Ensoñaciones de Salvador Dalí.

Zoya Nosnik, Maestra en Historia del Arte nos acompañó a entrevistar al joven y entusiasta Director General del Museo,  Alfonso Miranda Márquez, quien además de conversar animadamente se ofreció,  como un moderno Cicerone, a guiarnos por  la exposición.

Alfonso Miranda es historiador, egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México; se especializó en arte contemporáneo y decodificación de la imagen visual y sonora.  Estudió además psicoanálisis,  buscando encontrar puentes de comunicación a través del lenguaje simbólico de lo imaginario, para traducirlo en los espacios de un museo.  Comenzó su trayectoria como investigador del Soumaya,  para seguir como curador por cuatro años y finalmente pasar a la dirección general.

La arquitectura del Soumaya es, en sí, una pieza de arte. El edificio, diseñado por el joven arquitecto mexicano Fernando Romero Havaux, describe formas orgánicas con una geometría vanguardista y acabados de alta tecnología. Romero es conocido internacionalmente por haber trabajado con el reconocido arquitecto holandés Rem Koolhaas ,en OMA, Rotterdam, y haber liderado la propuesta ganadora para el diseño de Casa da Musica ,en Oporto, Portugal, considerada un icono de la arquitectura contemporánea.

Letra Urbana, El pensador, Rodin

Cuando Alfonso Miranda se refiere al diseño del museo dice , “lo que buscábamos es un diálogo entre un edificio vanguardista que, aunque no fue construido ni diseñado pensando en esto,  está siendo referencial  para el rostro urbano capitalino y también para el rostro de modernidad o postmodernidad en América Latina.   En principio se trata de un cubo que se tuerce en su propio eje y tiene formas orgánicas en su interior.”    En arquitectura estas formas establecen puntos y figuras empáticos con la naturaleza y son llevados al espacio habitable.  En la fachada se observa una serie de enormes hexágonos que se van uniendo a muros irregulares, sin aristas.  “El hexágono es una de las formas geométricas perfectas que existe desde los seres unicelulares”, nos explicó Alfonso Miranda.   “Se trata de adosar esas formas a entornos donde no hay esquinas, donde se bordea. Así como en la  naturaleza misma vamos descubriendo de un espacio a otro, en el devenir de nuestra propia historia de vida vamos mutando, como la metamorfosis de Ovidio, de un sentimiento a otro, de una realidad a otra de una forma mucho más suave, flexible,  sin un sistema abrupto.”

Los muros interiores, sutilmente curvos, crean espacios enormes, libres de columnas. Los objetos se exhiben sobre muros falsos y vitrinas generando diversos ambientes que  favorecen la experiencia estética.  Las rampas de acceso a los diferentes niveles facilitan el recorrido y brindan una pausa propicia para reflexionar sobre  lo que se acaba de observar.

Ya desde el vestíbulo se percibe un ambiente que llama al deleite. Una réplica del grupo escultórico de Laocoonte y sus hijos,  cuyo original se encuentra en los Museos Vaticanos y data probablemente del Siglo I EC y, que según los críticos representa la impotencia y el dolor sobrehumanos, es de las primeras piezas que se pueden ver. Encontramos también  Río Juchitán, el último mural de Diego Rivera, realizado en mosaico, que se puede apreciar por ambos lados  y Naturaleza Muerta de Rufino Tamayo, otro de los grandes muralistas mexicanos, todo bajo la mirada impasible de El Pensador de Rodin en versión agrandada, como la que se encuentra en el Museo de París.

Al fondo de este inmenso recibidor surge una escalinata enmarcada en muros blancos redondeados, en cuyo centro, silenciosa y serena en su absoluta soledad,  La Pietá de Miguel Ángel, un bronce, réplica de la escultura en mármol.

El recorrido no sigue una pauta pre establecida y el visitante puede acceder siguiendo su gusto. Lo deseable, dice Miranda,  no es agotar el espacio,  como en los grandes museos que tientan para verse en un solo día, sino escoger  determinadas piezas,  obras puntuales que cada uno selecciona,  visitar algunas salas  y permitir un diálogo interno entre la pieza y nuestra experiencia o bagaje individual.

Letra Urbana, Mural Rio Juchitán, Diego RiveraLetra Urbana, Mural Rio Juchitán, Diego Rivera

Las variadas colecciones están distribuidas en seis salas y representan treinta siglos de arte.   Incluyen piezas de arte decorativo, monedas,  pinturas, retratos, paisajes  y esculturas del arte mexicano y europeo entre los Siglos XV y XX.  El último nivel, dedicado a la memoria de sus padres, Julián y Linda Slim, alberga la colección privada de esculturas de Auguste Rodin más importante fuera del Museo del artista en París, así como también una preciosa muestra de las Ensoñaciones  de Salvador Dalí.
Hay algunas muestras muy interesantes y peculiares, como la de monedas de Licio Lagos, cuya selección impecable supera incluso a la del Banco de México. También se encuentran fotografías, propiedad del joven coleccionista Daniel Liebsohn,  sobre un tema fuerte y entrañable en el ámbito simbólico como lo es la muerte niña, tradición cristiana de retratar  pequeños que murieron después de haber sido bautizados y antes de tener uso de razón para discernir entre lo bueno y lo malo.

El acervo del Museo es parte de la colección privada que, con ilusión y buen gusto, formó la señora Soumaya de Slim, de ahí que la muestra resulte muy ecléctica.  Algunas obras se adquirieron como lotes o colecciones completas,  pero la mayoría de las piezas se compraron una a una, a veces venciendo muchos obstáculos, como el caso del retrato del pequeño Jean Renoir, firmado por su padre.

Buscamos es ir estableciendo una nueva posibilidad de discurso estético de una manera sincrónica y diacrónica, no como una historia del arte segmentada y sistematizada, sino buscando un entrecruzamiento de  la información…

Aún se conservan algunas de las obras con que se inauguró la sede original del Soumaya, en Plaza Loreto, al sur de la Ciudad de México hace casi diecisiete años.  Se destaca entre ellas la máscara del Hombre de la nariz rota, una de las primeras esculturas del francés Auguste Rodin. Alfonso Miranda comentó a propósito de ella: “siempre me ha parecido muy interesante, por no decir también bella, la historia y el mensaje de esta pieza de Rodin, que retrata a su propio vecino parisino, un hombre cuya única cualidad era tener la nariz quebrada.  Esa máscara le va a representar a Rodin el no poder entrar al Salón de París.   Lo rechazan violentamente por querer introducir, entre esas formas bellísimas del Neoclasicismo y del  Romanticismo, algo que no es bello.”   Esta experiencia llevó a Rodin a decir que “lo bello no radica en lo hermoso,  lo bello radica en el carácter y en la verdad.”   Sin duda en esa máscara hay verdad, carácter, fuerza, contundencia y hay todo un imaginario simbólico que va a permitir dar el quiebre entre el devenir plástico de la escultura y la propuesta de Rodin.

En una Ciudad como México, que ofrece más de 130 museos, ¿en qué se destaca el Soumaya?  Alfonso Miranda afirma que “Lo que buscamos es ir estableciendo una nueva posibilidad de discurso estético de una manera sincrónica y diacrónica, no como una historia del arte segmentada y sistematizada, sino buscando un entrecruzamiento de  la información para entender, por ejemplo,  qué estaba sucediendo en el continente europeo y con la realidad mexicana, con artistas que estudiaron y se influenciaron mutuamente. Sin duda sería mucho más sencillo presentar las obras en la forma tradicional,  ver y analizar escuelas artísticas de manera  independiente.   Pareciera que se tratara de una mezcolanza sin un hilo conductor, tal como dijo severamente la crítica, pero cuando empezamos a ver temas, entrecruzamientos, nuevos abordajes, resulta que el discurso no es tan caótico como aparenta de entrada.”

 Foto Letra Urbana, Alfonso Miranda Márquez

Agrega su director que el Soumaya ofrece un arte que difícilmente puede verse en Latinoamérica, una región donde no es muy fácil  viajar y salir de las propias  realidades. “Ofrecemos de manera gratuita una colección espectacular como lo es el acervo más importante del escultor francés Auguste Rodin fuera de Francia, con la posibilidad de establecer un diálogo entre alumnos y sus maestros para comprender en lo que derivaron las propuestas de un arte moderno que rompe con esquemas del Neoclasicismo e incluso del Romanticismo, en la propia plástica rodiniana.  Podemos asimismo establecer un contacto con artistas del Impresionismo y otras épocas.”

En la búsqueda de proyectos que comuniquen esos intercambios, hay visitas que no llaman  guiadas sino mediadas, para construir puentes de enlace entre  los públicos y promover una experiencia estética en la que no es necesario partir de lo propio hacia lo de afuera, sino todo lo contrario, se puede buscar una armonía por contraste.   “Es frecuente en nuestros países latinoamericanos ese fervor por lo extranjero, por lo exótico  y de alguna forma valoramos muy poco nuestros propios fondos.  Además las colecciones mexicanas  se pueden ver en otros espacios museales de la propia capital.  Entonces buscamos el punto de quiebre justo a la inversa: abrir el marco de lo general a lo particular “, agrega el director del museo.

Para  la inauguración del Soumaya,  50 museos prestaron una obra para darle la bienvenida y fue interesante que espacios públicos gubernamentales y no gubernamentales, se sumaran a este nuevo proyecto. Otras experiencias de intercambio  fueron los  traslados de la Era de Rodin a Perú y al Museo de Arte Moderno de Bogotá.

Para construir puentes de enlace entre  los públicos y promover una experiencia estética en la que no es necesario partir de lo propio hacia lo de afuera, sino todo lo contrario, se puede buscar una armonía por contraste…

Con energía y dinamismo, Alfonso Miranda Márquez, con su comprometido equipo de trabajo, lleva al Museo Soumaya a trascender la función tradicional de exhibir arte. La apuesta es por una oferta institucional de inclusión que él mismo resume  como “un museo donde todos tenemos que sumarnos. Es importante la suma de los públicos en esa diversidad y estamos convencidos de que ésa es la ruta por seguir.  Los programas emprendidos por la fundación afianzan la relación con la comunidad, constituyen un concierto donde todas las voces se escuchan. Son programas que cambian vidas.”

El Soumaya asume un reto con  públicos vulnerables y atienden la discapacidad intelectual,  física y afectiva, incluyendo el autismo profundo. Quienes carecen de visión acceden a las esculturas usando guantes especiales, un ejercicio que se replica con público de visión normal que, con los ojos vendados, experimentan lo que implica imaginar esas formas.

El programa Familiarizarte  se lleva a cabo para que toda la familia participe  en actividades de expresión corporal, juegos de reflexión e interpretación de obras, que fortalecen valores sociales y éticos. La Edad de Bronce es un espacio para adultos mayores que quieren tener una actividad o simplemente compartir la experiencia del museo entre iguales.  Hay también un programa de  Alzheimer y arte, similar al del Museo de Arte de NY, que permite dialogar con la memoria, con lo que somos,  con lo que queda.

La Guarida de los Niños es un abrazo que el Soumaya da a las víctimas de la discapacidad afectiva, una dolencia que nos es propia en la realidad latinoamericana – los niños de la calle, de casas hogar, instituciones de asistencia social del D.F., madres solteras, etc.-, utiliza el arte como un medio para permitirles expresar sus ideas, mejorar su calidad de vida y buscar su incorporación a la sociedad.

Es importante la suma de los públicos en esa diversidad y estamos convencidos de que ésa es la ruta por seguir.  Los programas emprendidos por la fundación afianzan la relación con la comunidad, constituyen un concierto donde todas las voces se escuchan. Son programas que cambian vidas.”

“Hemos tenido experiencias muy conmovedoras….  ahí siempre se nos rompe un poco el corazón”, nos cuenta Alfonso.  “Hace un año realizamos una exposición de modas.  Invitamos a la gente que visitaba el museo a vestir una muñeca.  Eran muñecas de porcelana, desnudas, muy bonitas.  Se las llevaban a la casa con la única condición de que las regresaran, no para el museo, sino para que cada visitante la donara a una niña de una casa hogar – y bueno, cuando se propuso la idea surgió la duda ¿quién nos la va a regresar?    Regresaron todas, excepto una, de cien… además había un valor agregado, pues cada vestido debía estar derivado o inspirado en las colecciones del museo.  Recuerdo que ahí se me acercó una niña muy dulce, me dio un abrazo y me dijo “en verdad muchas gracias, te prometo voy a cuidar mucho a mi muñeca; mis papás no supieron cuidarme a mí,  pero yo voy a cuidarla a ella.”

Lo que sigue ahora, de acuerdo con Miranda, es el desafío de seguir compartiendo  el acervo  gratuitamente, en un espacio donde todas las voces se puedan escuchar y  construir más que un museo, un centro cultural para la Ciudad de México.  “Estamos convencidos de la necesidad de establecer  diálogos distintos  entre instituciones, mostrar que Latinoamérica no es el estereotipo, como México no somos nada más mariachi y  tequila. Entonces es apostar por construir una mexicaneidad y una hermandad latinoamericana  desde nuevos derroteros y si eso lo permite el arte como una manifestación de la cultura,  pues hay que apostar también por seguir construyéndola, hilvanándola y haciendo un tejido social mucho más cerrado.”

México, D.F., octubre 2011

Notas:
Colaboró en este artículo: Zoya Nosnik – Docente. Maestra en Historia del Arte

3 Comentarios

  1. Alfonso,te saludo y deseo sigas fomentando aun mas el arte que estas representando y difundiendo, porque es de esta forma que uno puede compartir el arte como en mi caso tambien yo difundo el arte te dire una frace hermosa que ha escrito el poeta, escritor pintor Salvador Padilla, para la pintora muralista » LIZ BONO »
    Ser artista es quehacer de los humanos, hacer arte es priVilegio de DIOS.
    Te envio la Página por si te interesa verla, http://www.lizbono.com
    yo soy su representante, mi correo es josbono@hotmail.com

    Alfonso felicitaciones.

  2. Alfonso he estado esperando me contestes y hasta la fecha no he tenido ninguna respuesta.
    En este letrero » DICE » Tus comentarios nos ayudan a crecer.GRACIAS!

    La Maestra, Pintora, Muralista » LIZ BONO » de talla Internacional,

    En la actualidad es: Tapatía, Mexicana, Canadiense, Francesa, cuyas obras están en el corazón de París, Francia, en el Emblemático, e Histórico Hotel » LUTETIA » que dentro de los 10 Hoteles más famo
    sos del Mundo está clasificado en tercer lugar, porque allí se originó el Art- Nouveau, el Art-Deco, e impuso la Moda de colocar Obra de Arte de los Maestros: Picasso, Renoir, Cezanne, Matisse etc.
    Contemporáneos: Armand, Cesar y Liz Bono.

    En la explanada principal del Palacio, Federal del Estado de Jalisco, Guadalajara av. Alcalde # 500
    Realizo el Mural » DOS SIGLOS DE INDEPENDENCIA Y LIBERTAD » Patrimonio de la Nación.

    Histórico también, por Decreto y en Ceremonia Solemne en el Congreso del Estado de Guadalajara, Jalisco.Le otorgaron la Presea » José Clemente Orozco «, como Mujer, Pintora, Muralista es la Primer y Única.
    Con anterioridad la otorgaron a Juan Soriano, Raúl Anguiano, Jorge Camarena etc.

    Por tal motivo considero que merece tener la atención de que Uds tambíen la reconozcan o cuando menos vean sus obras.

    Atentamente.
    Josefina, promotora de Arte y Cultura. Pintora Muralista LIZ BONO

    josbono@hotmail.com http://www.lizbono.com

  3. Mis felicitaciones y alta apreciación para el Sr. Carlos Slim , más ahora que acaba de invitar a la gran Artista Sofía Loren, yo soy descendiente de Italianos, así es que me pareció maravilloso el que Sofia
    fuese invitada especialmente para celebrar su Cumple Años, en hora buena.

    Que Dios los guarde por muchos Años más.

    Atentamente.
    Josefina, promotora de Arte y Cultura.
    josbono@hotmail.com

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