Por
Damien Hirst actúa como artista, a veces como filosofo, y en ocasiones como bufón. En su reciente exhibición en la Galleria Borghese en Roma, se presentaron más de ochenta trabajos. Archaeology Now muestra obras de su serie Treasures from the Wreck of the Unbelievable (Tesoros del naufragio de lo increíble) en conjunto con sus lienzos intitulados Colour Space. Su creación nos hace cuestionar el valor del arte, el cómo nos relacionamos con él, y en lo que creemos acerca de las historias que rodean estas obras.
Al exhibir estas piezas al lado de obras griegas y romanas tenemos una visión ambigua de lo que significan estas esculturas. Hirst utiliza materiales clásicos relacionados con la creación escultórica ancestral, desde el mármol de Carrara hasta la malaquita, cristal de roca y bronce. Sus obras contrastan y al mismo tiempo dialogan con la colección de la familia Borghese, fundada por el Cardenal Scipione.
Son leyendas que vuelven, que transforman constantemente al arte occidental, que los artistas toman como referencia de inspiración. Hirst las ha fragmentado, reinventado y unido a un pasado ancestral del cual no logramos sacudirnos.
Una cabeza de Medusa, o un busto azul de Neptuno, hacen alusión a un pasado mitológico conocido, el legado greco-romano que ha pasado por los siglos de forma artística y arqueológica. Son leyendas que vuelven, que transforman constantemente al arte occidental, que los artistas toman como referencia de inspiración. Hirst las ha fragmentado, reinventado y unido a un pasado ancestral del cual no logramos sacudirnos. El Rapto de Proserpina realizado por Gian Lorenzo Bernini (1621-22) en mármol blanco pulido hace contraste con el rugoso Desnudo Griego en bronce de Hirst (2013). Cubierto de algas fosilizadas, de corales protuberantes, la obra parece una escultura antigua recién rescatada del océano; todavía sin limpiar el cuerpo femenino se muestra adusto y orgulloso como testigo del paso del tiempo.
Cada una de las obras de Hirst creadas en el 2015, fueron preparadas y mostradas al público primero como un documental de uno de los hallazgos arqueológicos mas importantes del siglo XXI. La película muestra como este tesoro se encontró en las profundidades del océano, y como, con gran esfuerzo fueron sacándose del mar, desconcertando a historiadores y especialistas. Esculturas nunca vistas estaban cubiertas de algas y conchas por el paso del tiempo, obras que se teorizaba habían sido creadas para un gran coleccionista de arte en la antigüedad y estaban siendo transportadas a su lujosa villa cuando el barco naufrago. La narrativa de este documental nos hace creer en lo increíble, y finalmente, de forma muy sutil nos damos cuenta de que toda esta producción filmográfica es una broma. Se trata de las obras que Damien Hirst ha creado como parte de una serie de esculturas que finalmente exhibió en la Biennale de Vencia en 2017.
La misofonía es un trastorno neurológico que provoca una sensibilidad extrema a ciertos sonidos. Los afectados reaccionan con irritación, desconciertan a su entorno y se genera un clima de tensión que afecta la convivencia y relaciones sociales.
“Desde diosas hasta reinas, de cortesanas hasta científicas, de actrices hasta santas, desde escritoras hasta políticas… hemos estado en todas partes, aunque un manto de silencio se empeñara en cubrirnos o ignorarnos”. Julia Navarro.
Estrasburgo, situada entre Francia y Alemania, fue declarada Patrimonio de la Humanidad. Nos sorprende con su luz y sus reflejos, el reloj astronómico en la Catedral de Notre Dame y la Iglesia de Santo Tomás, donde Mozart tocó el órgano.
¿Nuestras conductas son el resultado predeterminado por la biología y el ambiente que nos toca? El dilema del determinismo está más vigente que nunca.
SUSCRIBIRSE A LA REVISTA
Gracias por visitar Letra Urbana. Si desea comunicarse con nosotros puede hacerlo enviando un mail a contacto@letraurbana.com o completar el formulario.
DÉJANOS UN MENSAJE
Imagen bloqueada