Alberto Burri nació en la ciudad de Castello, Perugia, Italia. Se recibió de médico-cirujano y sirvió con esta profesión durante cuatro años al ejército italiano a principios de 1940. Las tropas aliadas lo capturaron en Túnez y fue enviado a un campo estadounidense de prisioneros de guerra cerca de Hereford, Texas; es allí donde comienza a hacer sus primeras incursiones en la pintura con los elementos que halla a mano.
De vuelta en Roma continúa su trabajo como artista poco tradicional con el uso de técnicas inusuales, provocadas por la escases de materiales, por lo que se convierte en un importante referente para otros jóvenes artistas. Sus primeras exposiciones datan de los años 1947 y 1948.
Arpillera, plástico, madera y quemados son parte de los elementos y técnicas de que el artista se vale para montar una admirable y a veces insistente homogeneidad de su obra, que devienen de su dedicación a la pintura en su condición de prisionero de guerra.
Los sacos (Sacchi), proceso hecho con restos de arpillera rasgada, cosida y remendada que combina con trozos de ropa en desuso, que toman especial preponderancia a partir de 1950 dominando las exposiciones que lo llevarán desde Roma a Chicago, Nueva York, Colorado, Oakland, São Paulo, Seattle, Springs, Milán, entre otras ciudades.
También las Maderas (Legni), Combustiones (Combustioni), Hierros (Ferri) impactarán sobre muestras en Roma, Londres, Nueva York, Bruselas, Viena, etc.
Innumerables galerías y museos acogieron su obra que con sus técnicas de collage y montaje propició la atmósfera para los movimientos artísticos de la posguerra como el Neo-Dada, Process Art, Arte Povera.
Siguiendo la línea de posguerra que comenzó 1979 con el artista alemán Joseph Beuys seguido por Gutai del arte Japonés de posguerra, Antoni Tàpies, Lucio Fontana, Lee Ufan entre otros, el Guggenheim de Nueva York, presenta a Burri de quien en esta oportunidad se podrá ver la retrospectiva más completa donde el artista italiano hace uso de componentes inusuales junto con técnicas experimentales entre el limite de la pintura y la escultura, poco conocida en Estados Unidos, que comprende Catrami, Muffe, Gobbi, Bianchi, Lengni, Ferri, Combustioni plastiche, Cretti y Cellotex .
The Trauma of Painting es organizada por Emily Braun, curadora invitada y profesora distinguida del Hunter College y del Graduate Center; con Megan Fontanella, curadora asociada a cargo de las investigaciones de colecciones, centrándose en la historia y procedencia de las obras de arte; y Ylinka Barotto, asistente curatorial. El estudio de acompañamiento es dirigido por Carol Stringari, directora adjunta y conservadora jefe de la Fundación Guggenheim.
Con la colaboración de Fondazione Palazzo Albizzini Collezione Burri, que reúne una de las colecciones más importantes de Burri en la ciudad de Castello, Italia.
Del 9 de octubre de 2015 al 6 de enero de 2016
En el Guggenheim New York