Una de las películas mas aclamadas del MDC Miami Film Festival de este año es Dead Pigs, dirigida por Cathy Yan que se presentó en el pasado Festival de Sundance con gran aceptación del público.
Con un contexto irónico que hace alusión a la creencia del zodíaco chino de que los cerdos representan buena suerte, la cinta relata un evento basado en un hecho real en el cual lse encontraron cerdos flotando en el río Yangtze, una epidemia a la cual no se le encuentró explicación alguna.
La situación ha dejado devastados a los campesinos que viven de la cría de estos animales, entre ellos el viejo viudo Wang (Haoyu Yang) cuyas inversiones en otros negocios han fallado, y se encuentra endeudado y amenazado.
Su hermana Candy Wang (Vivian Wu) que ocupa la casa de la familia que dejaron sus padres, se dedica a un salón de belleza que da soporte emocional a sus jóvenes clientas. Pero la casa es la última reliquia de un barrio en extinción donde se planea un nuevo conglomerado de edificios. Candy se niega a desalojar, y se encuentra también bajo enorme presión por los empresarios constructores.
El hijo de Wang, Wang Zhen (Mason Lee), finge ser un exitoso hombre de negocios en miras a complacer las expectativas de su padre, cuando en realidad es un simple mesero en un restaurante gourmet que atiende el tipo de clientela que vive de las apariencias. Allí es donde conoce a Xia Xia (Meng Li), que cumple ese criterio debido a un padre que la baña en bienes materiales.
Wang no tiene otra opción que confrontar a su hermana para tratar de vender la casa, que nunca se dignó a ocupar, haciéndonos sentir un drama que no solo aqueja a esta familia, sino a una sociedad entera.
La directora entrelaza las historias de una manera elocuente integrando distintos géneros que se mueven entre el drama, la comedia y el musical, para mostrar una sociedad que se ha materializado hasta el extremo.
Los principios socialistas que una vez sentaron base han quedado de lado, o tal vez reposan en los libros de historia. El producto humano que ahora vemos sufre de una superficialidad aun mayor que los mismos occidentales que lo inspiraron, y que hoy se muestran haciendo empresas en ese Shanhai transformado por el capitalismo rampante.
La cinta maneja aspectos relevantes para la audiencia tanto local como internacional, como el tema de la familia, el medio ambiente, la obsesión por el dinero y las normas sociales, con un sorprendente final que le augura los mejores tiempos a esta directora.
Programación Miami Film Festival