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Sundance Festival de Cine 2014

El festival de cine de Sundance 2014 que tiene lugar en las montañas de Utah y cuenta con mas de 50 mil asistentes, no parece haber llenado las expectativas, según el consenso de la crítica, si se lo compara con años anteriores que tuvieron la sorprendente Beasts of the Southern Wild (Benh Zeitlin, 2012), Frutivale Station (Ryan Coogler, 2013) y The Spectacular Now (James Ponsoldt, 2013).
El Festival tuvo lugar del 16 al 26 de enero y de las casi 10 mil películas que se postulan, 119 fueron seleccionadas y clasificadas de acuerdo a su género.
Whiplash (Damien Chazelle), una cinta que trata sobre la autodestrucción de un músico de jazz confrontado a un maestro despótico y obsesivo, ganó el premio como Mejor Película Norteamericana, y también obtuvo el Premio de la Audiencia en la categoría de Drama. Muchas otras películas este año tocaron el tema de la lucha por el triunfo y el reconocimiento en la vida de músicos, como Frank de Lenny Abrahamson con Michael Fassbender, y Only Lovers Left Alive, la última producción de Jim Jarmusch con Tom Hiddleston y Tilda Swinton.
La cinta chilena Matar a un Hombre, de Alejandro Fernández Almendras, que trata la transformación de una familia sometida al acoso de un delincuente de barrio, ganó el premio de Mejor Película fuera de Estados Unidos.
En cuanto al género documental, que parece ser el fuerte de Sundance, el premio al Mejor Documental Norteamericano lo ganó Rich Hill (Andrew Droz Palermo y Tracy Droz Tragos), un relato urbano acerca de tres jóvenes en una pobre ciudad de Missouri. El documental sirio The Return to Holms (Talal Derki) sobre la vida de tres jóvenes en Homs, tercera ciudad Siria, que da una visión mas realista y personificada a un conflicto que aun no alberga solución, ganó como Mejor Documental fuera de Estados Unidos. Otro documental también sirio, Of God and Dogs, del colectivo Abounaddara, ganó el Premio del Jurado, pero por motivos de seguridad no puede revelarse la identidad de los cineastas que llevan cuatro años trabajando en la filmación.
Cabe mencionar el caso de Private Violence (Cynthia Hill), un documental con escenas conmovedoras sobre violencia doméstica, donde se muestra principalmente el caso de Deanna Walters secuestrada por su propio marido en un camión donde casi la estrangula frente a su propia hija. La discusión después de la presentación con la directora y una de las activistas también presente, Kit Gruelle, desató una catarsis colectiva donde se desenmascararon situaciones de abuso entre los asistentes hasta el punto en que alguien mencionó con nombre propio a su abusador, un ciudadano local. El documental se presentará en HBO, y servirá para abrir los ojos ante la posibilidad de denunciar y tratar un problema tan extendido como encubierto en todos los niveles económicos y sociales de la comunidad mundial.
La presencia de talentos jóvenes que confiesan muchas veces haber terminado el film el día anterior resulta muy emocionante. El caso de Justin Simien que ganó Premio Especial de Jurado Para Nuevos Talentos con su sátira Dear White People fue la sorpresa, y como para otros, el solo hecho de estar allí presentes con su última producción, resulta un sueño hecho realidad.
Otro de los temas candentes fue el del Internet, con sus virtudes y sus desgracias. El documental Web Junkie dirigido por Shosh Shlam y Hilla Medalia mostró la situación al interior de una clínica de rehabilitación para jóvenes adictos al internet manejada por el gobierno chino, donde se analiza tanto la desesperación de los padres impotentes ante el vicio de sus hijos, como la soledad de éstos que no encuentran otro refugio sino los juegos virtuales.
Love Child , documental dirigido por Valerie Veatch, muestra el aterrador y extremo caso de una pareja jóven cuyo bebé de dos años fallece de inanición mientras ellos están obsesivamente dedicados a los juegos virtuales.
Por último, The Interntet’s Own Boy (Brian Knappenberger) es otro doloroso documental sobre la vida y muerte de Aaron Swartz, el conocido prodigio de la tecnología, genio en computación y activista por la libertad en el Internet, quien se suicidó a la corta edad de 26 años ahorcándose en su apartamento en New York. Víctima de su propia lucha, se ve sometido a una cadena de cargos por delitos cibernéticos y a lo que su familia considera excesos por parte de la fiscalía, que lo podrían haber llevado a prisión por 35 años y un millón de dólares en multas.
Es de esperar que estos documentales obtengan difusión masiva por el importante mensaje que conllevan, tanto a nivel de denuncia como de prevención.

 

 

 

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