
El trabajo del intérprete es muy importante para Sepúlveda, “sin su existencia, el mundo sería pobre”. Agregó también que tiene una buena relación con los traductores de sus obras en todo el mundo, y que esta figura -si hace bien su trabajo- no realiza solo una traducción literaria, sino también conserva el texto porque entiende la intención del autor original, aun si esta no es explícita.
¿Cómo es posible saber si el texto está bien traducido? Sepúlveda explica que la única manera es conocer la opinión de los lectores y esperar el suceso que tendrá el libro.
Sara Raimondi, Italia.
Fuente: http://multimedia.lastampa.it/multimedia/salone-del-libro-2011/lstp/46073/