Search
Close this search box.

Edición
12

«No existe la información, solamente la transformación»

Entrevista con Bruno Latour por Geert Lovink y Pit Schultz
Paris
Bruno Latour es un filósofo francés especializado en la antropología de la ciencia. En una entrevista realizada por el australiano Geert Lovink, Latour pone un acento interesante que remarca la fijeza de la información y expresa un pensamiento crítico y controversial que afirma que las computadoras no son abstractas, no conspiran contra lo humano y son la muestra de lo poco moderno que somos.

Cerisy Juillet 2006 Photo Fabian MuniesaCerisy Juillet 2006 Photo Fabian Muniesa

Bruno Latour (París) es un filósofo, especializado en la antropología de la ciencia y la tecnología. Es profesor en el Centro de Sociología de la Innovacion en la Ecole Nationale Superieure des Mines de París. Es reconocido como » uno de los pensadores más agudos, aunque idiosincrático, en el tema de la ciencia y la sociedad».
Entre sus libros, publicados por la Universidad de Harvard, se encuentran «We Have Never Been Modern», «Aramis, or the Love of Technology» y «The Pasteurization of France». Su conferencia Documenta puede ser escuchada o leída en http://www.mediaweb-tv.de/dx/0816/gaeste-frame.html

G.L: En la actualidad hay dos conceptos sobre las computadoras: uno es que son máquinas abstractas basadas en las matemáticas y el lenguaje. Opuesto a este concepto, está el de la computadora del futuro como un aparato procesador de imágenes, como un televisor interactivo. ¿Cómo considera Ud. esta distinción entre la maquina basada en puro lenguaje versus un medio basado en imágenes?

B.L.: No creo que las computadoras sean abstractas. Hay un artículo muy interesante «On the Origin of Objects» (Sobre el origen de los objetos) escrito por un filosofo especializado llamado Brian Cantwell-Smith, un libro sobre lo impreso digitalizado. Comenta que el hecho de que las computadoras se basen en que haya un 0 o un 1 no tiene conexión alguna con lo abstracto. En realidad esto es extremadamente concreto, nunca es 0 y 1 al mismo tiempo. La distinción que Ud. insinúa es algo engañosa. El origen de esta distinción está basado en la noción de información, pero solamente existe la transformación. Una información que perdura a través del tiempo y del espacio, sin que sea deformada, es un mito total. Los que trabajan con esta tecnología, usan la noción de transformación. Del mismo byte, en términos de codificación abstracta, se obtienen resultados muy diferentes en relación directa con el medio que se ha empleado, no a la información. Es una mala interpretación de la ciencia y de la critica contemporánea de las imágenes, toda esta querella en contra de la naturalización.

La distinción que Ud. insinúa es algo engañosa. El origen de esta distinción está basado en la noción de información, pero solamente existe la transformación. Una información que perdura a través del tiempo y del espacio, sin que sea deformada, es un mito total. Los que trabajan con esta tecnología, usan la noción de transformación.

G.L: Pero todavía existen dos miradas diferentes respecto a las computadoras: o es una máquina que es propiedad de la comunidad científica o va a ser una procesadora de imágenes, que muy pronto será parte de la cultura popular.

B.L. No estoy seguro que estoy de acuerdo con los términos de esta división. Decir que las computadoras son máquinas científicas y abstractas es engañoso. Hay un libro llamado «The Soul of the New Machine» (El alma de la nueva maquina». Esta si es una expresión adecuada que se encuentra en el trabajo de Brian Smith sobre la encarnación de la computadora. Después de todo, está hecha de silicona. Tiene su propia encarnación a nivel de dígitos y bytes.

La computadora no es un tanque de abstracciones, cientificidad y técnica. Para mí la ciencia y la tecnología no son sinónimos de lo abstracto. Quiere decir que para mi es algo altamente socializado, extremadamente encarnado y localizado. Puede que existan computadoras mal diseñadas o conexiones inadecuadas que no son ideales para el uso humano. Pero la idea de que hay computadoras abstractas que conspiran contra lo humano, es absurda. La computadora vista como un cuerpo extraño, como un meteorito. Aun desde Pascal con su primera máquina calculadora, ha prevalecido el aspecto social.

Puede que existan computadoras mal diseñadas o conexiones inadecuadas que no son ideales para el uso humano. Pero la idea de que hay computadoras abstractas que conspiran contra lo humano, es absurda.

Michel Serres expone la idea de que todo lo que estamos discutiendo sobre computadoras es el sueño de Leibniz hecho realidad. La idea de un lenguaje universal que codifica y descifra todo, la idea de una biblioteca gigantesca accesible a todo el mundo fue idea de Leibniz. Finalmente se está haciendo lo que Leibniz propuso. Pero se convirtió en una máquina que no trabaja exactamente según las expectativas, como fue soñada en el siglo XVII. Se ha convertido en la historia de lo que llamo lo móvil immutable. La noción de la función contradictoria de inmovilidad y máxima movilidad al mismo tiempo. Por supuesto, está ligada a la historia de la civilización occidental, para maximizar estas dos funciones contradictorias. Elisabeth Eisenstein remarca este punto en su historia de la imprenta. La digitalidad es una extensión, un paso adelante de los tipos móviles. No es un elemento revolucionario. Los pixels movibles se agregan a los tipos movibles. Siempre reacciono negativamente a la idea de que la computadora es un cuerpo extraño dentro de lo humano. Negarlo tipifica el peligro del entusiasmo por la técnica. Yo agregaría a los parámetros de la comunicación «No creáis que la computadora tiene una historia corta». La computadora es un ejemplo perfecto de lo poco moderno que somos. La posibilidad de cambiar los límites entre imágenes, textos y cosas y la virtualidad es un rasgo típicamente antropológico. Ahora en París la gente está usando un «Segundo Mundo» visualizado, donde se puede alquilar departamentos. La gente que vive en las afueras tan sin gracia, pueden alquilar un departamento en los Champs Elisees. Pero esto no es nada comparado con vivir en la sociedad, que es una realidad virtual para empezar.

Se materializa en la pantalla con la noción de «avatars» (arquetipo fantástico) y realidad alternativa. Pero es una ruptura revolucionaria de la vida en sociedad. Mi argumento es exactamente anti-Virilo si Ud. quiere.

G.L: Al fin de su conferencia sugiere que debiéramos tomar distancia del fluir de imágenes. ¿También considera que existe el peligro de una saturación de información?

La digitalidad es una extensión, un paso adelante de los tipos móviles. No es un elemento revolucionario. […] ”. La computadora es un ejemplo perfecto de lo poco moderno que somos.

B.L.: Siempre defendí lo contrario. Hay una herencia de la disputa iconoclasta, que en la actualidad se renueva alrededor de la noción de saturación de imágenes. Muchas imágenes fueron destruidas porque la gente estaba saturada. Este fue exactamente el mensaje de Lutero. Muchas imágenes que esconden los rasgos más importantes, que no son visibles. Mi argumento es iconofilico, que es siempre lo contrario. Una imagen aislada del resto no tiene significado alguno. La imagen de una galaxia carece de referencia. La transformación de las imágenes de la galaxia sí la tiene. De modo que se trata de un argumento anti-información. Las reproducciones de una galaxia no tienen contenido, en sí la imagen no tiene significado si no puede estar relacionada con el espectro de galaxias. Lo que otorga referencia es la transformación de imagenes. Ser iconofilico es seguir el fluir de las imagenes, sin creer que llevan información. Tampoco es iconoclasta en el sentido de que nos deshagamos de la imagen porque a lo que queremos acceder, es lo invisible, lo inefable.

Todo lo contrario. Si seguimos la lógica de las imagenes, ellas mismas nos conducen a otra imagen. Las imagenes muestran transformacion, no información. Pero aqui esta la contradiccion, la practica diaria de transformacion y la charla, el bombo sobre el fluir informatico, la universalidad del Internet, etc. Es lo mismo con el dinero. Cuando hablamos con especialistas en finanazas, todo es totalmente localizado, basado en la confianza, un círculo pequeño de gente que se conoce por su primer nombre. Nuevamente, si salimos de este círculo, hablamos de corrientes de dinero yendo de New York a Hong Kong en un segundo. Hay un gran bombo respecto a globalización, urgencia, universalidad, velocidad. Por otro lado, vemos transformaciones localizadas y parece no haber conexiones entre ambas. Alguien como Paul Virilio es interesante porque él, como corresponde, ataca este bombo. Esta crítica tiene gran sentido común. Pero nunca estudiamos la práctica. De manera que la computadora no es una máquina abstracta. No es como si masticara.

Todo está altamente encarnado y situado en chips de silicona. Existe esta extraña relacion de amor y odio. Virilio es un caso tipico de ésto. El ama odiar al tecno bombo. Y los técnicos a menudo odian amar. Pero hay un punto medio entre ambos.

Pit Schultz: Pero está la noción de secreto y hermetismo. Los especialistas y los técnicos tienen conocimientos secretos sobre la implementación de los modos de transformar. La gente común no sabe cómo funcionan los mercados financieros, cómo las monedas se transforman de una en otra. Estas transformaciones se convierten en mitos y están causando pavor.

Ser iconofilico es seguir el fluir de las imágenes, sin creer que llevan información. Tampoco es iconoclasta en el sentido de que nos deshagamos de la imagen porque a lo que queremos acceder, es lo invisible, lo inefable. Todo lo contrario. Si seguimos la lógica de las imágenes, ellas mismas nos conducen a otra imagen.

B.L.: Pero, ¿es el secreto o es el conocimiento localizado? Yo presiento que no debiéramos acrecentar estos mitos. Nada de mitos respecto a saberes localizados! La noción de información, urgencia universal, globalización, acrecienta el mito. No es raro para el público en general que se necesite mucho trabajo para producir una imagen. Miren la cámara gris aquí en Documenta, o la muestra de Hamilton. Cuando se habla de partículas, nadie lo entiende. Cuando se habla de huellas de burbujas en la cámara de burbujas, inventada por Wilson para el estudio de las nubes, es muy fácil entenderlo. Los laboratorios cultivan el secreto por razones legales, pero esto es mucho menos importante de lo que parece. Mucho del misterio existente en la práctica de la ciencia proviene de que tratamos con cosas oscuras. Pero los intelectuales no debieran oscurecer las cosas aun más. Es un misterio bien recibido para poder exponer a la luz los reclamos fáciles. La noción de la práctica localizada tiene mucho sentido común. Yo no tengo idea de cómo se hacen las salchichas. Las salchichas son producto de innumerables transformaciones. Y así como no hago gran bombo con las salchichas, tampoco lo hago con la imágenes de la computadora. Lo mismo que se hace aquí en Hybrid Workspace: introducir un grupo tras otro en la práctica de la tecnología. Esto pareciera ser algo perfectamente sensato. Nada está oculto excepto nuestro amor por odiar.

G.L.: Las universidades ahora están cerrando su parte pública del Internet y están haciendo sus propios intranets cerrados, paralelos. Muchos datos que estaban públicamente disponibles serán quitados. Esto viene acompañado de la privatización y de la comercialización de mucha de la investigación científica. ¿Cómo ve usted estos progresos?

B.L.: No soy un experto en este asunto. Lo que sé es que no se puede pedir que los cientificos trabajen en público, conectados con millones de personas. La noción de apertura y urgencia es una pesadilla total. Pero es diferente a la nocion de conocimiento privado. Este proceso se ha dado por siglos en el campo de la química. Está el aspecto legal. Cuándo es privado y cuánto es apropiado? La apertura no es muy productiva. Hay que tener nichos locales. Las disciplinas aisladas, desconectadas, han tenido gran éxito en el pasado. Es necesario tener una esquinita propia y ya se verán las consecuencias del Internet en el trabajo científico. Los científicos se subscriben a numerosas y onerosas publicaciones porque necesitan el sello del conocimiento jerarquizado. Mientras la Red no encuentre la forma de proveer esta jerarquía, no va a tener autoridad dentro de la comunidad científica. Las publicaciones en la Red son todavía muy tradicionales. No ha habido mayor movimiento, con la excepción, tal vez, del correo electrónico.

Virilio es un caso tipico de esto. El ama odiar al tecno bombo. Y los técnicos a menudo odian amar. Pero hay un punto medio entre ambos.

G.L.: ¿Cómo juzgaría Ud. a los intentos como Nettime, para desarrollar una crítica dentro de la red, situándose dentro de la tecnología y no juzgando desde afuera, para reponerse de la fase desmedida sin volver al pesimismo cultural?

B.L.: Si se encontrara la forma de pasar por alto el territorio, de disolver localizaciones y jerarquías, tal vez también se podría reconstruir y tener filtros, gustos, juicios y valores. Todo el mundo se queja de la falta de jerarquía en la Red. Mientras menos medios se interpongan al acceso, será mas cerrado y jerárquico el acceso a ciertos sitios, En nuestro centro hemos inventado un sistema que llamamos «semiotext» que otorga mapas de textos en el Internet por medio del uso de un sistema llamado Leximap. Esto produce mapas muy jerarquizados. Este tipo de sistema va a proliferar mucho. Da profundidad de visión, que puede conducir a la critica. Éste se convertirá en un sitio muy elaborado y apreciado si la comunidad se entera de que allí se otorgan criticas acertadas. Nuevamente, todo aquello que vaya en contra de la noción de información va a surgir de por sí. Universalidad, rapidez, urgencia no van a estar allí de pronto, a pesar de todas las expectativas.

Todo lo contrario. Lo que va a surgir será transformación local, jerarquía, gusto, crítica: eso si que va a suceder. La idea de información como inmutable y movilidad como no contradictoria, que se puede mover hacia cualquier parte, no funciona en el nivel científico, ni tampoco al nivel de las computadoras ni de la política. Podemos apostar a ganar que eso no sucederá.

Universalidad, rapidez, urgencia no van a estar allí de pronto, a pesar de todas las expectativas. Todo lo contrario, Lo que va a surgir será transformación local, jerarquía, gusto, critica: eso si que va a suceder.

G.L.: ¿Cómo ve la relación entre espacios virtuales y reales, las rupturas y las posibilidades de conectarlos, como lo hacemos aquí, en Workspace? ¿Cree Ud. en la llamada sinergia de los medios de comunicación? Aquí trabajamos con video, con la Red, tenemos la tradición de películas y también la imprenta, naturalmente. Tenemos aquí todos estos medios. ¿Debiéramos nosotros apoyar la idea de que cada maquina se mantenga como un medio híbrido?

La dificultad con el desarrollo de las computadoras es aceptar la pequeña innovación que son, sin exagerar su importancia. […] Decir que vivimos en un mundo cibernético, por otro lado, es completamente absurdo.

B.L.: Híbrido es una palabra que me gusta mucho. Pero también sabe Ud. que no hay acceso instantáneo a estas máquinas. Es necesario capacitar gente. Nunca van a trabajar exactamente como uno se lo propone. Se necesitan gran cantidad de cables diferentes. Aquí están colgados de la pared. A veces la televisión trabaja con otro medio. En Francia, nunca se puede hacer nada porque tenemos un SECAM estándar. Cada vez que el entusiasmo se apaga y cuando se dice que se está a punto de producir un medio que dará un efecto nuevo, esa sí una afirmación perfectamente razonable para mí. Conectar todo con conecciones es pura ideologia. Cuado se trata de multimedia, ya estaba en Colmar, mirando las piezas de altar de Matthias Grueneald, en Isenheim. Esto es hipermedia: los diferentes paneles se abren y cierran según el día de la semana y de las fiestas que se celebran en esa fecha. Incluye pintura, escultura, lecutura del evangelio, la misa. La regla es la siguiente» sea el medio que sea, siempre se encontrará a alguien que haga la conexión con ellos. Pero esto no quiere decir que hay la posibilidad de una conexión instantánea. Lo digital solo agrega velocidad. Pero esto es poca cosa comparado con charlas, grabados o escritura. La dificultad con el desarrollo de las computadoras es aceptar la pequeña innovación que son, sin exagerar su importancia. Agregamos algo a todo esto cuando usamos palabras como universal, no mediatizado o global. Pero si decimos que para que se haga visible a la comunidad de entre 5 a 10 billones de personas, en la larga historia de los elementos móviles, la conversión del «byte» está agregando un poco de velocidad, que favorece algunas conexiones más que a otras, esto si parece una declaración razonable. Decir que vivimos en un mundo cibernético, por otro lado, es completamente absurdo.

Notas:
Editado por Patricia Riemens | Traducido por D.I.Bell para Letra Urbana
Notas:
[1] Entrevista realizada a Bruno Latour por Geert Lovink y Pit Schultz. Material publicado en http://www.nettime.org/Lists-Archives/nettime-l-9709/msg00006.html Traducción realizada por Letra Urbana.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Artículos
Relacionados

Imagen bloqueada